Seguramente no hubiera hecho falta ponerle nombre a algo que llevaba sucediendo casi un mes; no hubiera hecho falta porque el hecho de ponerle fecha a un sentimiento, no hace que te quiera más. Pero tú, demostrando que me conocías mucho más de lo que yo me imaginaba, y mucho más de lo que se puede llegar a conocer a una persona en un mes; decidiste ponerle nombre, ponerle un 3O.O4.2OO9.
Y si, creo que desde ese día el mundo es un poquito mejor, desde ese día creo en muchísimas cosas y me he dado cuenta que desde entonces el sol brilla más.
Que tu sonrisa es lo más bonito que me puede pasar, que tus ojos no sólo son unos preciosos ojos verdes cuando me miras, que si tú me dices que me quieres no importa que tenga que pasar toda una semana sin verte. QUE TÚ ERES ESA PERSONA...