Alguien dijo una vez que la vida se cuenta por los momentos que te dejan sin respiración.... Pues yo ya llevo unos cuantos. Si por muchos pasos en falso que de, por muchos caminos equivocados que elija y siga, por muchas veces que tenga que volver sobre dichos pasos... Aún así siguen llegando los buenos momentos, las pequeñas cosas que a uno le hacen seguir, buenos momentos.
Y así son las cosas, después de tanto esfuerzo, tantos agobios, tantas prisas, y alguna que otra lagrimilla; al final acaba saliendo el sol... Después de la tormenta SIEMPRE llega la calma (eso dice mi amigo Alejandro Sanz; y yo me lo creo, porque me lo podido aplicar un sin fin de veces; es más, me lo he podido aplicar todas las veces; y que así siga siendo porfavor).
Pues bien, hoy estoy en otro día de esos de agobio (supongo que todavía no demasiado, porque si no no estaría aqui), mañana último examen de la temporada. Con bastantes temas que aprenderme todavía, pocas horas de sueño por delante, y en fin, todo lo que conlleva un examen que de momento no va demasiado bien. Pero también podría ser peor, muuuucho peor. Hay tiempo!
Y es que como veis hoy estoy positiva. Hoy creo que todo puede ser posible. Estoy más que instalada en mi mundo particular (mundo golosina, calle piruleta).
Por cierto, el finde genial. Cumpliendo las expectativas, prometía y se cumplió. Sólo puedo quejarme de lo de siempre: muy pocas horas, el tiempo sigue pasando demasiado deprisa, etc. etc. etc.
Me parece muy injusto que como pronto no se pueda repetir (ni parecido) hasta el día 14.