Como buena época de exámenes que se precie, toca ordenar a fondo la habitación (o por lo menos y casi obligatoriamente El Escritorio.) Sin duda en eso he salido a mi madre, guardo muchas cosas, quizá demasiadas, y de vez en cuando (cuando me da por ordenarlo a fondo) le echo valor y me desprendo de alguna de esas cosas que guardé en su día, y que guardé porque en ese momento significaba algo.
Esta vez me he encontrado hasta una bolsa de una tienda que un día guardó un regalo. Es una de las cosas de las que me he desprendido, aunque tengo que reconocer que sin mucha pena, por lo "absurdo" de su valor real, aunque en su día tuvo un gran valor por lo que representaba...
Supongo que para echarle valor y tirar una de esas cosas a la basura, primero he tenido que tirar los sentimientos que lo acompañaban...
Ya he dicho que he encontrado de todo, miles de cosas del Atleti (postales, fotos, recortes de periódico, autógrafos, un pin, etc.), la velita de Taizé (aquel veranazo), la tarjeta del hotel donde estuvimos para el campeonato internacional con la dedicatoria de Dario (italiano) de Forza Atleti que representa unos cuantos días allí "encerrados", un pañuelo que me regaló mi abuela (una de esas cosas que NUNCA tiraré), mi cuaderno de 1º de bachillerato con las dedicatorias de cada compañero, muchísimas cartas, etc. etc. etc. Una pena que no pueda ver tantos recuerdos todos los días, aunque en verdad así me hace mucha más ilusión verlo de mucho en mucho. Te suben el ánimo en días tontos.
Te acordarás de ella, aunque hubieras preferido no hacerlo. Pero lo harás. Te acordarás del sonido apagado de sus lamentos, y del brillo de su risa. Recordarás el tacto de sus manos buscando las tuyas, y el sabor de sus labios mordiendo los tuyos. Te acordarás de cómo solía hacer que te preocuparas por ella de una manera más obsesiva de lo que hubieras preferido hacerlo, e incluso recordarás el sonido de su voz al otro lado del teléfono. No hace falta que te diga que no te olvidarás de recordar su cumpleaños, y alguna otra fecha especial que por cualquier estúpido motivo fue importante. También recordarás cosas que antes no solías hacer, como el olor que dejaba en tus sábanas o los restos que dejaba sobre tu mesilla. No sabrás olvidarte de cómo fruncía el ceño, ni de cómo sus tonterías te hacían reír, tampoco te olvidarás de la sensación de encontrar su cara entre la gente, de ese roce estudiado, de esa mirada fugitiva, de aquella lectura de pensamientos, de leer silencios y no precisamente entre líneas... Recordarás cuando seguía pareciendo una niña, su dulce locura. Cuando te acuerdes de todo esto, significará que ella no está a tu lado, y empezarás a darte cuenta de esas cosas... Ya sabes, de esas cosas que ella solía escribir a las 2:45h de la mañana, de esas cosas que sólo ella sabía escribir
Pero ya no vas a tardar en volver a mi lado... ¿A que no? ^^
Y así ha llegado septiembre, y desde luego he tenido días muchísimo mejores. Pero otra de las cosas que he aprendido es que los principios no suelen ser demasiado importantes, si las cosas van mejorando restas importancia a esos "malos" principios. A si que espero que los días que vengan sean mejores.
Aunque mañana al final no sea el día. No importa, ya llegará; más pronto que tarde. De hecho, cada día que pasa, está más cerca de llegar.
Hoy no pongo canción (para eso estoy yo, para romper mis propias costumbres), porque sería la del otro día.. Ya sabeis: it's time to be a big girl now... & big girls don't cry!
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silbiditos!