A dos finales de cambiar la historia.
Es enorme ser del Atleti, siempre lo ha sido. Pero como dice mi padre "estas niñas nunca han vivido ninguna gran victoria, ya les tocaba disfrutar", muy lejos queda el doblete del que no viví nada o casi nada. Sin embargo, recuerdo el día que volvimos a primera como uno de los mejores días que recuerdo. Esa gran noche que Madrid era del Atleti. Que no podías dar dos pasos sin encontrarte a alguien con algún complemento atlético, y por supuesto, la sonrisa en la cara mientras se dirigía a Neptuno.
Ya nos toca celebrar algo a nuestra altura. Poder volver a Neptuno con una copa (trofeo) bajo el brazo. Creo que la afición lo merece, no hay un sólo día en que no me haya puesto algo del Atleti y no haya recibido ningún: "Aupa Atleti", con gente que me iba encontrando en mi camino. Personas que no había visto en mi vida, y que seguramente, no volveré a ver. (ojalá en Neptuno, dentro de unos días.)
Es otra historia, así es el Atleti.
El otro día me preguntó mi padre en el coche cuando volvíamos de mi academia, y jugábamos la ida contra el Livepool. Que yo por qué era del Atleti. La verdad es que sólo supe contestarle que gran parte de culpa la tenía él.
Sólo somos unos cuantos locos e incomprendidos.
Quizás no sepa ponerle palabras y no sepa responder bien a la gran pregunta. Sólo sé que lo soy, que lo siento.
Alguna que otra vez he pensado en ello, puesto que si mi padre no fuera del Atleti, no hubiera conocido estos colores, no los hubiera hecho míos. Pero entonces, sería algo superficial, volver a esos años en que todos éramos de un equipo (no valía el: A mi es que no me gusta el fútbol) porque había que ser de alguno, había que mojarse en todo y para todo. Sin embargo, cada vez que juega el Atleti se me pone un nudo en el estómago que aumenta si no lo puedo ver, y más aún si estoy en la academia esperando a algún mensaje o toque que me informe. Que se me acelera el corazón cuando vibra el móvil, lo que anuncia que o el Atleti (en el mejor de los casos) o el rival, ha metido un gol...
Porque sé que podemos. Porque es hora de dejar de vivir de la historia y volver a vivir del presente.
Porque este es mi ATLETI, y es una BENDITA LOCURA!
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silbiditos!